EL INSPECTOR ESCOLAR 2. Tenía bastante tiempo que no me encontraba con Gonzalo Rodríguez Pacheco, quien fuera Inspector Escolar de Escuelas Primarias en el municipio de Tecuala y que todavía (más de 70 años) hace proselitismo político favorable a sus inclinaciones idealistas, en este encuentro constaté que sigue siendo un crítico sincero, espontáneo y limpio, al que se le escucha con reflexión, respeto y admiración. La última vez que tuve contacto con él, todavía no se jubilaba pero se encontraba acosado por los dirigentes sindicales que se frotaban las manos con su plaza de Supervisor, todavía cubría su última comisión administrativa en SEPEN , la que estaba dispuesto y así me lo dijo: “a cumplir Enrique, hasta en tanto yo crea que deba de jubilarme sin que ningún líder charro me presione ofreciéndome doble plaza de Inspector para que lo haga”.
Gonzalo desde que tengo memoria, se deja ver en la plaza principal de Tepic, haciendo círculo con sus amigos que gozan de escuchar su jocosa charla que versa sobre anécdotas de sus compañeros dilectos, sus pronósticos políticos llenos de imaginación y fantasía, las venturas y las desventuras de los amigos vivos o RIP y además, comentarios desfacedores de entuertos. Como todos los martes a un lado del Portal de Menchaca, con oportunidad preconcebida me encontré con Gonzalo Rodríguez, con Jesús Cortés, Pedro Montero y Felipe Medina e hicimos un corrillo alegre hasta el desborde de las lágrimas en el cual, nos hizo reir con todas las anécdotas más conocidas de Chuy Cortés, de algunas fábulas menos irrespetuosas de, entre otros: Pedro, Chochi, Porfirio, Profe Nati, Peyaya, Demetrio y de Joel. Casi siempre sonroja a los presentes con anécdotas propias y lo digno de consideración es que ninguno se molesta por el color que imprime, porque sabemos que Gonzalo lo hace motivado por la bien intencionada estimación que a todos tiene. De entrada y después del saludo acostumbrado, nos invitó a los presentes a asistir a las reuniones de profesores jubilados en la sala de juntas dela Sección 20 y nos dijo que estaban bien y que en la última de abril/2008 se había acordado hacer los festejos del Dia del Maestro próximo el 14 de mayo y que cuando menos lo esperaban pidió la palabra y arengó a los asistentes a no pedir limosnas a ningún “diputadete” y que no se invitara a los líderes charros, festejando su osadía dirigiéndose a mí, dijo: “imagínate hermano, en su madriguera para que les doliera, me llevé los aplausos de todos”.
Durante doce años de trabajo escolar en Tecuala, cultivé con el Profesor Gonzalo Rodríguez Pacheco una buena amistad fincada en la relación que se da entre Inspector y Profesor de una zona escolar, así como, por la amplia convivencia social que se origina al compartir por cualquier motivo el “gusto costeño” en los centros botaneros tan famosos en Tecuala y sobre todo, por conllevar la actividad político sindical de la región en aquella época del desplazamiento de Acción Revolucionaria Sindical por las hordas golpistas de Vanguardia del SNTE. El lugar de origen de Gonzalo es Atonalisco, municipio de Tepic, pero es más de Tecuala, por su permanencia de alrededor de 40 años en ésta región camaronera. El “Profe Gonzalo” como compañero y amigo, o como, docente, directivo y político, siempre el mismo camarada caracterizado por: su gran disponibilidad para resolver los problemas de los amigos, su gran cariño para los que se han formado bajo su influencia profesional, su sensibilidad a más no poder, por las aflicciones de los compañeros y amigos, su fidelidad a las causas más nobles de los oprimidos y SOBRE TODO, su indeclinación en el repudio a los caciques y sus testaferros.
AL AMIGO CON AFECTO 1. Ya que hago referencia de Gonzalo y Chuy, viene a mi memoria un buen amigo de los tres, con el que compartí la docencia elemental y que simultáneamente, trabajaba en primaria, secundaria y bachillerato, además, con el tiempo llegó a ser Director de la Escuela Secundaria donde prestaba sus servicios. Originario de uno de los poblados más importantes de la ribera del Río Acaponeta y perteneciente al municipio de Tecuala, sus estudios normalistas los realizó en la Escuela Normal Urbana de Tepic y tuvo el privilegio de ser Director de la Secundaria de la cual egresó. Mi amigo es todo un personaje con variadas facetas en las que destacó en todas y en todas se hizo respetar como las circunstancias lo ameritara o como se acostumbraba en la Tecuala histórica heredada por el Mano Negra y el Melón, así pues, con comprensiones e incomprensiones, cuando andábamos con él gozábamos de su esplendidez y los amigos nos sentíamos tranquilos bajo la protección del compañero, al respecto, una referencia trascendente de esos tiempos: los vanguardistas del SNTE con traiciones, engaños y falsas promesas se habían apoderado de la Casa del Maestro Federal que era el bastión simbólico del sindicalismo en Nayarit, los ARSistas nos organizamos para recuperarla y llegado el momento, la columna de choque encabezada por El Pechi solicitó su desalojo a los espurios dirigentes que presumían la protección del SNTE, ante la negativa, una tronante voz se escuchó secundada por un puñetazo sobre los cristales de la Lonchería, “no venimos a negociar” y la presencia de nuestro amigo se hizo sentir y sin esperar más los Braulios, los Liberatos y los Tiburones de entonces, salieron despavoridos todos malolientes abandonando el sitio de la desvergüenza vanguardista.
Como docente en los niveles de primaria, secundaria y bachillerato su didáctica era tan entendible que los alumnos deseaban verse agraciados con su enseñanza de las Ciencias Naturales, la cual estaba respaldada con un imponente físico que rebasaba 1.90 metros y que en su juventud era de lo más alto que se daba, solo comparable a la del Chirrión o la del Piola. Como Directivo supo imponer su estilo y sus ideas administrativas, como El Cid, sus logros más reconocidos fueron después de dejar de ser, de tal manera, que cuando se le sustituyó, sus propios compañeros lo añoran y reconocen que fue mejor que su remplazo con todo y sus blasones. En la política, su otra pasión: como estudiante, siempre al frente en el debate y en la contienda política de las organizaciones estudiantiles que en ese entonces se nutrían de la estrategia y la ideología de los grandes maestros normalistas Enrique Hernández Zavalza y J. Trinidad Alcantar Maldonado. Como partidista, fue un militante de gran disposición al activismo político y con gran entrega para su partido, que su disciplina y lealtad era ofrendada desinteresadamente para que los amigos coronaran sus aspiraciones políticas.
Al camarada se le debió reconocer su trayectoria con algunas situaciones de elección popular, sin embargo, “el partido” le fue desleal al no reconocer sus merecimientos, por ello, jamás manifestó resentimientos ni tampoco buscó postulamientos por otros partidos, como lo hacen actualmente los vivales de la política. Su cambió de opción política se dio sin esperar nada, porque su anterior partido dejó de estar a la altura de sus anhelos y era de justicia tener que dejarlo, además, sin resentimientos de ninguna naturaleza se entregó a fortalecer su nueva militancia. Actualmente de mi amigo, ni idea, pero sin riesgo a equivoco, debe seguir bregando con la vitalidad que da la convicción de que lo que hace siempre ha sido sincero, genuino, congruente y vertical. http://nayariteducacom.blogspot.com