PRESIDENTES MUNICIPALES 2008

Más de lo Mismo.

Enfir. Educomentarios.

SÍNDROME DE PORDIOSERO. Han transcurrido 50 días, desde la toma de posesión del cargo hasta la fecha en que aparezca esta nota y los presidentes municipales no dan señales de empezar a cumplir en los hechos sus compromisos de campaña y se la han pasado con nimiedades, es más, tal parece que todavía no salen de la resaca ocasionada por los festejos de felicitación y apoyo que les ofrecieron sus simpatizadores.
En todos los presidentes se da: un sentimiento de pordiosero que aflora cuando se lamenta, "no nos dejaron nada, lo que es nada para empezar y así no se puede hacer nada"; una congoja de burócrata que después de periodo vacacional recurre con desesperación a cualquier institución bancaria en busca de un préstamo; una pena de sentarse a llorar por el gran problema que están confrontando; una sensiblería de impotencia de suplicar "un poco de tiempo" para cuando tengamos; y, una procacidad de seguir prometiendo lo que parece imposible que puedan cumplir.
Indudablemente, con honrosas excepciones, los presidentes municipales se están viendo incapaces y no es para menos, las pillerías de los salientes, la reducción del presupuesto, la crisis económica y la permeabilidad a la corrupción y la impunidad darán al traste, con sus ilusiones de “sudar la gota gorda” para cumplir con el sueño de tener la oportunidad de trabajar por los desposeídos, los perseguidos, los miserables, los que carecen, los enfermos, los que tienen miedo, los discriminados y los que piden, piden y vuelven a pedir y terminan dándoles lo de siempre ...un dedal para que lo chupen, o bien, a hacer concha.

HONROSA EXCEPCIÓN. Menos mal que en el ayuntamiento de Tecuala, el alcalde Beto Parra, los lamentos iniciales los ha sustituido por talacha que no relumbra, pero que demuestra que si tiene ganas de trabajar y que quienes lo llevaron al cargo no se equivocaron. El Sr. presidente se ha dedicado a hacer lo que es debido, sin tener que ir California USA a realizar un posgrado para que le enseñen que las calles con baches se tienen “bachear” y que si tienen lámparas que no funcionen se tienen que sustituir, que si hay basura se tiene que recoger, que los carros chatarras en la vía pública se deben poner en el corralón y que el panteón, el estadio, el mercado, la cárcel y el rastro, deben ser prioritarios en el mantenimiento y no en las promesas para cuando lleguen los recursos.
Sin descanso y estresándose, para tomarle cariño a la función pública, Parra Grave se dedica a hacer gestoría de recursos económicos, de maquinaria para cubrir necesidades de urgencia en las comunidades, de promoción de proyectos viables, de que con sus peticiones le “ensaliven las orejas” sus gobernados y manteniendo un ambiente de cordialidad y entendimiento entre pueblo y gobierno.
Hay situaciones que parecen intrascendentes pero que se requiere entereza para corregirlas, porque ello implica, enfrentarse a organizaciones, grupos, amigos y conocidos, que por comodidad de las autoridades anteriores se han mantenido en la inconsistencia, en el desorden y en el error y sin embargo, el alcalde de la esperanza tecualense, por medio del convencimiento de que primero están los intereses de la sociedad, se ha decidido a dar directrices para que se terminen anomalías que ponen en entredicho a un buen gobierno, tal es el caso de: la reglamentación del funcionamiento de cantinas y depósitos de cerveza, el aumento de salarios a la policía municipal y al mismo tiempo, condicionarlos, para que se cumpla sin corruptelas y malos ejemplos, y, la reubicación de las vendedoras de mariscos en un local específico donde no obstaculicen el flujo vial.
Muchas son las razones que ha tenido Alberto Parra para ponerse a llorar y sin embargo, como él sabe que todo se permite menos llorar, ha sabido afrontar su desventura de acuerdo como decía mi vecino “Pizarrón” ¿Usted quería verdad?, pues ahora sale aunque sea raspado y no se vale llorar. No es para menos, con un ayuntamiento endeudado por 7 millones de pesos, sin fondos para cubrir derechos laborales de los empleados, con deudas a casas comerciales, talleres y proveedores y con todos los vehículos y aparatos destruidos, por todo esto y por el compromiso con el que ha actuado, el Contador Alberto Parra Grave, se ha ganado el respeto y la deferencia de tirios y troyanos en la orgullosa Tecuala

MAS DE LO MISMO. En la capital del estado los índices de aceptación para el ayuntamiento no son los más aceptables, honestamente, no ha tenido la oportunidad el presidente municipal de demostrar que ya no son sueños sus buenos propósitos de la toma de gobierno, porque lo hasta ahora ejecutado, son REALIDADES QUE URGEN pero rutinarias y que no tienen nada de diferente a como se han venido haciendo o IDEALISMOS DE LARGO PLAZO que se retardan y se ven con pasividad, pero desde que se inician, despiertan el interés y convencen. Soy de los que confiamos en el advenimiento al gobierno municipal de RSC, sobre todo, porque representaba la opción que impediría la llegada de otros aspirantes que por su origen o sus méritos políticos al margen de las aspiraciones populares del momento, pero independientemente de lo que se argumente, honestamente el alcalde no está a la altura de las circunstancias y lo hasta ahora realizado, no demuestra “el entusiasmo, el ingenio, la creatividad y los bríos” que en reiteradas ocasiones ha manifestado tener, la verdad, “no despierta grandes pasiones.
La verdad que en las colonias populares, DONDE VIVEN los que esperan que la administración de RSC sea antónima y menos demagógica que la de su antecesor, quién después de haber satisfecho su ego con adefesios de lujo innecesario, como es el pórtico de acceso al Parque Ecológico, se dedicó por el prurito de que se diga que trabajó hasta el último día de su función o de gastarse lo que había para no dejar nada, a realizar rehabilitaciones viales y de drenajes ya entrada la temporada de lluvias y como consecuencia , destruir las vías públicas y ocasionar todas las incomodidades que ello implica, DONDE VIVEN los que tienen esperanza que RSC cumpla su sueño de tener la oportunidad de trabajar por “los que menos tienen, los que no han sido llamados a la puerta por la justicia; los que en la mañana se levantan y miran al horizonte, en un reclamo por la condición lastimosa en que viven, llena de carencias, de necesidades, de enfermedad, de miedos y los que sufren la injusticia, el acoso, la discriminación”. Indudablemente que con el banderazo dado en la construcción del acceso de entrada al Parque Ecológico por la avenida Colosio, honestamente es señal que el actual ayuntamiento será más de lo mismo.
No una, sino en varias ocasiones RSC ha afirmado con toda la ANGUSTIA que le es posible, la necesidad de “dar atención urgente a la población y proporcionarle los servicios públicos con eficiencia, con calidad y calidez, con el objetivo de mejorar la calidad de vida de los habitantes, en especial de los que menos tienen”. ¿Realmente, el acceso al Parque Ecológico por la Avenida Colosio es una obra para mejorar la calidad de vida de los habitantes que menos tienen?, o acaso, ¿será solo otro motivo de relumbrón como el de la Avenida Tecnológico, que con lo que costó hubiera sido suficiente para dejar decorosamente y de calidad las principales calles de las colonias situadas en EL TERCER DISTRITO, desde el puente del ferrocarril hasta el puente de San Cayetano?, o bien, ¿ será el acceso al Parque Ecológico de la Riviera del Río Mololoa la forma de ver por la gente que menos tiene en las colonias de mayor marginación? ... La verdad no concatena con lo prometido de combatir la marginación de los que menos tienen y tal parece, que solo se pretende dejar constancia personalizada de una administración en el complejo urbano de moda.

EL MULADAR. De los primeros cincuenta días del gobierno de RSC, lo más notable han sido las múltiples lamentaciones de haber entrado en funciones con una severa carga financiera en materia de deudas por parte de la anterior administración y aun cuando se sabía de antemano la cruda realidad, los malandrines que salían jamás dieron a conocer la dimensión de la situación que heredaban y que era tal, que no había dinero ni para pagar la quincena vencida a los trabajadores y menos para cubrir adeudos a proveedores. Ante esta situación hay que reconocer al alcalde que tuvo los arrestos necesarios, para “no sentarse a llorar” y una vez más manifestar que “tiene ganas de trabajar, tiene creatividad y tiene ganas de servirle a la gente de Tepic”, hasta aquí, honestamente se ganó más votos de simpatía, pero los días siguientes fue tan reiterativo en la escasez de dinero y además, se exhibió pidiendo públicamente confianza por lo que no se podía hacer, que muchos se desencantaron por que RSC da muestras de debilidad ante las circunstancias y sobre todo, ante la “puñalada trapera” de un colaborador cercano que manifestó enfáticamente que la ciudad de “TEPIC ERA UN MULADAR”, esto último, debe esperarse que el pueblo lo haga airadamente si así lo desea, pero si lo hace un funcionario municipal, de ninguna manera es lealtad al compañero de fórmula que fue el que acarreó los votos para que se colara en el ayuntamiento. INDUDABLEMENTE. De lo que no hay duda, hasta hoy, es de que los tepicences tienen un gobierno transparente, honesto, que rinde cuentas y que al final del trienio llegará a convencer.

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